En el Carrer de la Pietat, 1 hay una de las puertas de acceso al Claustro de la Catedral,  conocido popularmente por el “Claustre de les oques” por las 13 ocas que viven en dicho claustro.
Esta puerta de acceso da nombre a la calle ya que en la parte superior de la misma se encuentra un relieve obra del artista Alemán  Michael Lochner que vivía en Barcelona y que representó en este relieve la Pasión de Jesús.
No obstante dice la «historia» que una noche uno de los curas, mientras dormía se despertó sobresaltado, se incorporó, se dirigió corriendo hacia la puerta y observó como unos ladrones estaban intentando robar el relieve, el cura se puso a gritar para alertar al vecindario y a sus compañeros y los ladrones salieron corriendo sin poder perpetrar el robo.
Bien.. está claro que el cura debería tener un sueño muy ligero y que los ladrones deberían de utilizar como mínimo un martillo percutor para liar semejante escándalo, el hecho es que acto seguido el relieve fue sustituido por una copia en madera y plástico y el original guardado, se supone a buen recaudo, siendo otra de las circunstancias que no dudan en exponer los que critican el Barri Gòtic por tratarse (según afirman) de un Barrio postizo y prefabricado para la atracción de turistas.